Todo acto de gobierno tiene consecuencias en toda la sociedad y, si esos
actos están empapados de corrupción, las consecuencias son
terroríficas.
Cada vez que se roban los recursos del estado, es menos salud, menos educación, menos trabajo genuino... En consecuencia más miseria y postergación en el pueblo.
Estamos viviendo en Santiago del Estero la etapa más corrupta de nuestra historia en democracia. Se ROBARON mucho más que dinero, se robaron las ilusiones de quienes confiaron en ellos y, de los que no confiaron también.
El último acto cobarde y nefasto del gobierno fue quitarle el sueldo a los docentes, a quienes decidieron decirles "BASTA" a tanto afano sistémico y organizado.
Pretendieron aleccionar y dar el mensaje: "Ya saben lo que les pasará si se meten con nosotros"... No les importó dejar despojadas a miles de familias, de la posibilidad de pagar sus alimentos, medicamentos y los servicios esenciales que garantizan una digna subsistencia. No les importó... ¡¿Qué les va a importar!? si están cegados por la avaricia y esa ambición enfermiza que los lleva a pisar las cabezas de quienes se interponen en sus cometidos...
Pero no contaron con el Escudo más poderoso que protege a la docencia; un escudo amalgamado de dignidad y solidaridad; el escudo que nos permite soportar los golpes continuos que estos DELINCUENTES, que se creen dueños de la provincia y de nuestras voluntades...
Ya se les va a acabar...
La justicia Divina y Social les llegará...
Y la justicia del estado, la lerda justicia del estado, también los alcanzará...
Estoy convencido que así será.
Cada vez que se roban los recursos del estado, es menos salud, menos educación, menos trabajo genuino... En consecuencia más miseria y postergación en el pueblo.
Estamos viviendo en Santiago del Estero la etapa más corrupta de nuestra historia en democracia. Se ROBARON mucho más que dinero, se robaron las ilusiones de quienes confiaron en ellos y, de los que no confiaron también.
El último acto cobarde y nefasto del gobierno fue quitarle el sueldo a los docentes, a quienes decidieron decirles "BASTA" a tanto afano sistémico y organizado.
Pretendieron aleccionar y dar el mensaje: "Ya saben lo que les pasará si se meten con nosotros"... No les importó dejar despojadas a miles de familias, de la posibilidad de pagar sus alimentos, medicamentos y los servicios esenciales que garantizan una digna subsistencia. No les importó... ¡¿Qué les va a importar!? si están cegados por la avaricia y esa ambición enfermiza que los lleva a pisar las cabezas de quienes se interponen en sus cometidos...
Pero no contaron con el Escudo más poderoso que protege a la docencia; un escudo amalgamado de dignidad y solidaridad; el escudo que nos permite soportar los golpes continuos que estos DELINCUENTES, que se creen dueños de la provincia y de nuestras voluntades...
Ya se les va a acabar...
La justicia Divina y Social les llegará...
Y la justicia del estado, la lerda justicia del estado, también los alcanzará...
Estoy convencido que así será.
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